domingo, 16 de enero de 2011

Nápoles


Nápoles está ubicada en la región de Campania, Italia, y en la provincia que lleva su mismo nombre. Ocupa una superficie total de 117 km2 y es sin duda, una de las ciudades más pobladas del país. La vida en Nápoles es disfrutable desde muchos aspectos: su gran pasado, el arte a toda hora y su excelente oferta gastronómica la convierten en la favorita entre las ciudades vecinas. Hay varias características que hacen que su pueblo sobresalga, entre ellas que hablan un dialecto propio, el napolitano, que al igual que el propio nombre de la ciudad surgió de muchas deformaciones de palabras griegas.

Pero no se puede hablar de esta ciudad sin hacer referencia a su historia. Los primeros datos que pueden relacionarse con Nápoles, datan del siglo VII a.C. De allí en más, grandes figuras fueron parte de ella, como Nerón y Virgilio. También fue aquí donde se encarceló al emperador con el que se terminó el gran Imperio Romano. Siempre la historia de la urbe se caracterizó por las resistencias y las dominaciones sucesivas. Nápoles tiene un gran guardián: el famoso volcán Vesubio, que terminó con las ciudades de Pompeya y Herculano. Es la vista más impactante de Nápoles, pero la también la más aterradora.

Las calles de Nápoles están hechas de adoquines en su mayoría, formando unos laberintos de calles cortas en la que las grandes familias italianas desarrollan su vida cotidiana y sus costumbres. Esas familias que a los que no somos de allí nos parece de cuentos, de relatos de la época inmigratoria. Abundan las bicicletas y los ciclomotores, plagados de muchachos que juegan a domarlos, enloqueciendo la ciudad con sus caños de escapes. Nunca faltan aromas a comidas, las salsas se perciben a lo lejos y si uno se deja llevar por el olfato, encontrará también la larga mesa que reúne a las familias los domingos.

El pueblo napolitano se caracteriza por su frescura, que por momentos roza la brutalidad y las cosas aún se arreglan como en los viejos tiempos: a la fuerza y con irrupciones de la Camorra (mafia).

Hay un par de ceremonias imperdibles en Nápoles: una es la licuación de la sangre de San Jenaro, que se realiza tres veces al año, en mayo, en septiembre y en diciembre, la otra es disfrutar de una buena ópera en el teatro más famoso de la ciudad, el San Carlo.

El clima napolitano es bastante benévolo en invierno –ya que no hace mucho frío– y por demás caluroso en verano. Si bien la ciudad tiene una Bahía impresionante de aguas turquesas que invitan a un baño, lo mejor es ir en las estaciones intermedias, cuando el calor no castiga.

En el video se puede ver esta ciudad de mano de nuestros simpáticos amigos.de los que ya hemos visto en algún video y que seguiremos acompañándoles en sus viajes por el mundo

72h in Naples, '09 HD from Claire&Max on Vimeo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario